Ser mujer en estos tiempos no es cosa fácil, tenemos que jugar un sin número de roles. Somos hijas, madres, hermanas, novias, esposas, amantes, consejeras, cocineras, amas de casa, maestras, mediadoras, amigas compañeras y, por si fuera poco, la gran mayoría de nosotras nos hemos tenido que integrar a la vida laboral, unas por gusto o convicción, deseo de superación o necesidad. Y dentro de este cumulo de facetas, también tenemos la necesidad de un ratito propio para darnos un gustito; como bien dicen, "en gustos se rompen géneros", tal vez tu ratito sea cuando vez la telenovela o cuando escuchas tu música preferida, quiza cuando vas al salón de belleza o al spa, por que no pensar que preferirías leer un poema, una buena novela o el periódico; lo tuyo puede ser el ejercicio, alguna manualidad o arreglar tu jardín... en fín, puede ser cualquier cosa que te recuerde que estas viva, que existes, y no solo para los demás o para todos los compromisos que tienes que cubrir al día, si no para tí misma.
Recuerda que eres un ser que también necesita atención, tienes necesidades y gustos que no tienen por que estar relegados en la lista de tareas del día, y es que, si no te sientes bien ¿cómo podrías hacer sentir bien a quien se encuentre en tu alrededor?...
Pues bien, comulgando con lo anterior, ya me voy a tomar mi cafecito porque se enfría, además me espera alguien con quien charlar.
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